Recién un amigo me comentó que por fin era libre de toda la ilusión que había creado al manifestar dentro de su realidad apegos a amigos, familia, etc. El se había vinculado con una chica mucho años más joven que él. Habían creado "una burbuja de amor" donde nadie más entraba, eventualmente ella se embarazo porque había soñado que le decían que debía tener la "semilla" de él dentro de ella, él no quería pues es un hombre maduro, de mundo, y después de 15 años de viudez (su esposa murió de hepatitis) se dedico a viajar de un lado a otro, tener "amigas" y no comprometerse con nadie. Pues defendía "su libertad" con uñas y dientes. La ilusión de que una chica joven se "enamorara" de él cubría sus expectativas de ser importante para alguien, y decidió dejar todo por ella, además iba a ser padre de un niño, manteniendo la ilusión en su apogeo. Finalmente en el momento del parto el niño nació muerto. La "burbuja" se reventó el dolor de la pérdida y todo lo que ello conllevaba, terminó con la relación de muy mala manera.
Me preguntó: ¿Tiene que pasar algo terrible para hacernos despertar y reventar la burbuja del amor que construimos en nuestras mentes a partir del interés personal para obtener gratificaciones egoicas y hacernos regresar a la realidad física? ¿sabiendo que hemos consumido la energía física y quedar devastados sin importarnos nada solo alimentar al ego propio?. ¿Es esto la vida?
Me perdono a mi mismo por haber permitido y aceptado crear ilusiones dentro de mi mente y manifestar relaciones abusivas para alimentar mi ego en un ciclo sin fin donde no tengo llenadero de energía para sentirme vivo, vibrante, joven, necesitado e importante.
Cuando y como me vea a mi mismo creando ilusiones de amor para sentir que soy alguien dentro de este mundo. Me detengo y respiro. Pues entiendo que soy capaz de comprometer toda mi energía/ sustancia física para correr en pos de la ilusión de los ciclos sin fin que me tienen atado/atrapado como un drogadicto de la energía en cualquiera de sus formas.
Me comprometo a mi mismo a despertarme a mi mismo de la ilusión que me ata como a un drogadicto a la droga de la energía en cualquiera de sus formas.
Me perdono a mi mismo por arrastrar y dejarme arrastrar por la admiración de alguien a quien inconscientemente considere inferior y yo superior, lo que alimentaba mi ego al ser el "maestro", el "guía", el proveedor, creyendo que esto me renovaría, rejuvenecería y traería a mi vida cambios "positivos". Nunca me permití cuestionarme a mi mismo que nadie fuera de mi, en separación de mi mismo traería nada nuevo. Pues soy yo quien me he engañado atrozmente a mi mismo. No comprendí cegado por la ilusión y la importancia personal. Que no hay nada nuevo bajo el sol, solo historias recicladas a las que les di el nombre de "karma" cuando en realidad es únicamente la responsabilidad de mi mismo que no acepte ni permití, para levantarme por mi mismo dentro de esta realidad. Fugándome a los compartimentos de la mente secreta donde cree el personaje renovado al vincularme con una mujer joven. No dándome cuenta de que ella no traería la luz a mi vida, pues solamente he reciclado historias sin fin. No me di cuenta de que la oscuridad esta dentro de cada uno de nosotros, y el interés personal permea todas las relaciones hasta agotar la energía positiva y manifestar lo negativo.
Cuando y como me vea a mi mismo dejándome arrastrar y arrastrar a otros hacia la energía positiva para crear una ilusión compartida. Me detengo y respiro.
Me comprometo a mi mismo a darme cuenta de la oscuridad que soy yo, para nunca más ir detrás de nada que me separe de mi mismo como la vida dentro de esta realidad física.
Me perdono a mi mismo por caer en la ilusión de que me estaba creando mi propio paraíso individual, mi "burbuja de amor", donde nadie más entraría y en cambio manifesté nuevamente dolor, muerte, desasociego, infierno y gritos en la oscuridad.
Cuando y como me vea a mi mismo creando ilusiones que se perfectamente a donde me van a llevar de regreso al infierno. Me detengo y respiro. Pues entiendo que he sido el artífice de mi propio destino.
Me comprometo a mi mismo a perdonarme a mi mismo tanto abuso conmigo mismo y con los demás, arrastrándonos conjuntamente en la ilusión compartida para crear nuestro propio paraíso individual en el más puro interés personal. Sin darme cuenta de que en esta realidad física he carecido de sentido común para hacer lo mejor para todos por igual.
Me perdono a mi mismo por haber permitido y aceptado creer que soy libre de nuevo, al liberarme de toda responsabilidad de hacerme cargo de las personas a las que embarque en mi mundo de ilusiones, y que al reventarse mi propia burbuja de amor, ahora soy libre para andar de nuevo solo mi camino. Pues si no me paro y respiro,. seguiré anclado en otro tipo de ilusión que es creerme libre de todo pecado, y arrojar la primera piedra para culpar al destino, a la muerte, a la desilusión, cuando he sido yo el único responsable de crear esta realidad que ahora vivo en carne propia.
Cuando y me vea a mi mismo, culpando al destino de mi dolor por crear polaridad dentro de mi vida. Me detengo y respiro.
Me comprometo a mi mismo a tomar punto por punto todo el abuso como sistema de conciencia mental que he creado a mi alrededor en erupciones de dolor. Para tomar responsabilidad y perdonarme a mi mismo punto por punto. Entendiendo que creer que soy libre por fin, es otra forma de ilusión, de abuso e interés propio. Así que me comprometo por primera vez en mi vida a hacer lo mejor para todos por igual para ser libres todos de los sistemas de conciencia mental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario