Ayer noche estuve en la plaza de Garibaldi , había ido con una amiga a ver a un amigo común tocar cerca de ahí, lo esperamos y él ya salía con otros amigos y querían "fiesta", así que decidieron ir a este lugar cerca, y nos invitaron así que yo accedí un poco para compartir y a ver que pasaba, dejandome ir.
Nunca había estado de noche en la Plaza, lugar conocido por los mexicanos como de "barra libre" al aire libre, donde hay mariachis, vendedores ambulantes, prostitutas, travestis, lunpem proletarios, indigentes, extranjeros. En fin, gente que busca borrachera y desmadre.
El grupo en el que yo estaba con mi amiga y amigo y amigos de mi amigo, compraron cervezas y ahí en la plaza tomando, yo no participe realmente no quería ni se me antojaba. Porqué entonces necesitar algo ajeno a mi para sentirme bien? no había razón, solo separación sentí, no comunicación, rodeada de artistas underground en separación, en fuga de si mismos, buscando qué? cazadores de energía positiva, pude ver el mundo en ese microcosmos de la plaza, todos en pos de la energía positiva para fugarse de lo que es real, aquí en esta Tierra. Necesitar alcohol en la sangre para sentirse vivos, en compañía de nuestros cómplices mentales en donde todos nos alentamos mutuamente para seguir alimentando el sistema de conciencia mental sin parar, en una vorágine, en un remolino que nos pierde a nosotros mismos de nosotros mismos. Sintiéndonos cada uno especial dentro del cuerpo de la matrix.
Me perdono a mi misma por haber aceptado y permitido convertirme en una bujía de la matrix, a partir de la perdida de mi mismo, perdiéndome en el mar de la inconsciencia compartida por otros cazadores de energía positiva suprimiendo dentro de nosotros la energía negativa manifestada por el abuso y permisión que todos en este mundo alimentamos con cada sentimiento, cada emoción y cada pensamiento. Cuando me vea a mi misma siendo parte del carnaval de la danza de vampiros energéticos en pos de la energía positiva que pretenden suprimir la energía negativa. Me detengo, y respiro. Pues me doy cuenta que la vida en si misma no necesita ser atrapada dentro de la energía positiva/negativa para ser, para existir, pues el solo hecho de respirar me mantiene aquí presente, sin la necesidad de sentir movimiento energético dentro de mi para sentir que estoy vivo. Me comprometo a mi misma a permanecer dentro de la vida con cada respiro, pues me doy cuenta de que cada vez que dejo de respirar como yo misma, como la definición de la vida misma aquí y ahora, me convierto inmediatamente en un muerto viviente, en un vampiro en un cazador de energía positiva, en un abusador de la vida aquí en lo físico.
Me perdono a mi misma por haber aceptado y permitido convertirme en una mascarada de la "felicidad" alcoholizandome hasta perderme de mi mismo en cada vuelta del camino pues mi búsqueda incansable de la felicidad, del placer y del gozo, es la deshonestidad más grande que cualquier ser que se diga vivo puede cometer, es el "asesinato de la real realidad", en pro del interés personal a toda ultranza. Como y cuando me vea a mi misma convirtiéndome en un vampiro de energía positiva en aras de la "felicidad, el gozo y el placer". Me detengo y respiro pues entiendo/comprendo que es el interés propio, el movimiento energético dentro de mi el que demanda la energía positiva y no el ser que respira y se levanta por la vida, deteniendo todo abuso, desde el más pequeño hasta el más monstruoso. Pues entiendo y comprendo que no hay abuso pequeño, la suma de cada abuso en cada individuo alimenta de cualquier forma el status quo abusador que hemos permitido y aceptado. Me comprometo a mi misma a parar todo abuso dentro de mi hasta que sea hecho. Respirando a cada momento y a cada paso hasta convertirme en el ejemplo vivo que no necesita de energía positiva en ninguna de sus modalidades para ser y existir. Me reclamo a mi misma mi derecho a ser la expresión viva de la vida en igualdad y unicidad con la vida que no necesita aditamentos para ser, sino solo la oportunidad de ser y manifestarse en cada respiro.
Me comprometo a mi misma a entender/comprender/saber/ver lo que es real, a través del lente puro de la simplicidad, para pararme por la vida para no sucumbir a la tentación de convertirme en una cazadora de energía positiva/negativa para perpetuar el abuso aquí en la Tierra. Sino ser yo en lo simple, en lo concreto, en lo real sin el adorno ficticio de la felicidad arrebatandole a la vida su expresión inocente.
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