Paciencia: tranquilidad sosiego en espera de las cosas; resistir con serenidad y claridad de ideas, los males y adversidades. Virtud opuesto a la ira.
Me doy cuenta que suelo ser impaciente cuando espero algo preciso que no llega a un punto de especificidad, que me de certeza, puntualidad, seguridad.
Especialmente el día de hoy ese fue el punto que más se destacó en mi jornada. Me volví impaciente de oír hablar largo tiempo al profesor con el cual trabajo y percibir que el punto que estaba esperando que el tocara no llegó, y entonces empecé a inquietarme, a aburrirme esperando la hora de termino. Mostrando impaciencia moviéndome constantemente para cambiar de posición sobre la silla, poniéndome seria, enojona. Después llegó a casa y espero al Sr. electricista para que componga unas desperfectos y no llega y no llega y le hablo constantemente por teléfono me dice que tuvo un percance pero que vendrá lo cual no sucedió, entonces me dedico a buscar información que necesito para las clases y pienso que me va a llevar mucho tiempo y me impaciento, me desespero.
. La respiración se me acorta, el cuerpo quiere moverse y desestresarse, empiezo a generar pensamientos dentro de mi mente, de que las cosas tienen que arreglarse inmediatamente, como yo lo espero.
Me perdono a mi misma por haber aceptado y permitido mantener una actitud de impaciencia que genera movimientos de mi mente que va de un lado hacia el otro queriendo salir de la situación de irresolución para encontrar una solución inmediata que me de paz, tranquilidad y sosiego.
Me perdono a mi misma por haber aceptado y permitido sentirme culpable por comprometer a mas gente dentro de un tiempo en el que el electricista tenia que llegar para solucionar unos problemas y al no llegar sentirme responsable de la situación, y querer a toda costa que este Sr. este aquí, para relajarme por fin y dedicarme a mi misma el tiempo de manera sosegada.
Me perdono a mi misma por haber aceptado y permitido que ha partir de la impaciencia generar agitación mental y física dentro de mi olvidándome de respirar y saber que las cosas no se pueden forzar al nivel de los deseos propios sino bajo el principio de sentido común donde se hace lo mejor para todos y no solo para satisfacer mi interés personal para que por fin yo me pueda desentender del asunto y encontrar descanso.
Me perdono a mi misma por haber aceptado y permitido no darme tiempo para respirar y a través de la respiración encontrar sosiego y claridad para enfrentar mejor los vaivenes de la vida cotidiana.
Me perdono a mi misma por haber aceptado y permitido no darme cuenta que me vuelvo impaciente cuando no he dormido bien la noche anterior y mi cuerpo se siente adormilado y cuando tengo actividades muy temprano por la mañana no darme tiempo para comer pues eso también es un ingrediente de mi falta de rendimiento/atención pues me vuelvo impaciente cuando tengo hambre y no tengo nada en el estomago.
Me comprometo a mi misma a respirar cada vez que detecte que la impaciencia esta siendo presa de mi. Me comprometo a mi misma a descansar bien a alimentarme bien para que no llegué el mediodía con las pilas bajas y me empiezo a impacientar porque mi cuerpo requiere atención vital.
Me comprometo a mi misma a ser paciente cuando las cosas no salen como yo quiero, o espero o esta convenido de antemano, respirando y aprendiendo a esperar a que cada cosa se ajuste a los tiempos de la mejor manera, y si no buscar otra solución con calma y sosiego, y dejar de sentirme culpable por las cosas que o están a mi alcance resolver.
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